29/05/2014. Continúan las aventuras del aficionado a las motos utrerano, Manuel Ángel Fernández Roldán, en su reto-aventura de viaje por Los Balcanes. Este viaje cuya intención es visitar varios países de esta zona lo inició el pasado lunes poco antes de la 8 y media de la mañana. A esa hora salía de su casa y poco después de Utrera y tomaba rumbo Barcelona. Tenía por delante mil kilómetros hasta llegar al puerto de la ciudad condal y tomar el ferry que le llevaría a la ciudad italiana de Civitavecchia, a unos 60 kilómetros al norte de Roma.
Si hay dos palabras que definen estos dos días de viaje para este aventurero utrerano son “moto y barco”. Moto, porque el lunes me recorrió los 1000 kilómetros en 10 horas aproximadamente. Hubo momentos de pesadez y aburrimiento como cruzar la vasta llanura manchega. En otro momento al desviarse en un pueblo de Castellón para echar gasolina se encontró con un monumento de una araña "patas largas".
Eso son dos curiosidades y que le hicieron parar un momento para fotografiar. Por lo demás, soportar un fuerte aguacero al llegar a Barcelona y un fuerte viento de costado pasando Castellón.
El barco Cruise Roma de la compañía Grimaldi partió puntual, a las 22´15 horas. Al aventurero utrerano le gusta quedar viendo cómo la nave se aleja de la ciudad, poco a poco, sus motores rugen, las luces del puerto de la ciudad se van volviendo débiles y el contorno de la costa se ensancha. Las luces terminan por desaparecer y es entonces cuando reina la oscuridad alrededor.
Manuel Ángel Fernández considera que todo eso está muy bien y es casi poético, pero eso no le quita para que mientras se encontraba en ese estado contemplativo diera cuenta de un par de cervezas bien frías que cree se las tenía merecidas. De la noche mejor no habla, dormir en una de esas butacas fue como sentarse en un potro de torturas. “¡¡¡¡Vaya nochecita!!!! sin poder pegar ojo y cuando no dolía el cuello lo hacía la espalda, en fin ya pasó”, afirma.
Tras 22 horas de travesía y escala en Porto Torres (Cerdeña) el barco atracó por fin en el puerto romano. Para la etapa siguiente tiene 500 kilómetros hasta llegar a Bari desde donde tomará otro barco que le llevará a Durrés (Albania) para iniciar por fin el periplo balcánico.
Fuente: UTRERAWeb
